Fué ayer por la noche y fué la polla porque tiene mazo de sentido narrativo durante toda la historia y era un sueño muy largo.
Yo era amigo de una pareja que eran de una religión como oriental y muy mística y la chica estaba embarazada.
El caso es q se ponía de parto y yo estaba en el hospital con ellos, la niña nacía muerta y la llevaban a otra sala donde no estaban los padres, estábamos yo, la niña muerta y un tío suyo.
El caso es q el tío con algún tipo de instrumental quirúrjico empieza a abrirla, era un poco grande para ser un bebé recién nacido, estaba buscando algo dentro del cuerpo de la niña, algo q tenía relación con la religión de los padres.
Así q el hijo de puta estaba abriéndola sin permiso de los padres y sin que ellos lo supieran y encontraba algo parecido a un medallón en uno de los cachetes del culo de la niña, en el pequeño instante en q el tío va a coger las gafas para mirar con mas atención lo que ha encontrado yo aprovecho y cojo una especie de colgante que está pegado detrás del medallón y me lo guardo sin que él me vea, como en un acto intuitivo para putearle por su comportamiento.
El tío observa el medallón y parece decepcionado, parece que no tiene valor, yo salgo de la habitación.
Busco por el hospital a algún otro familiar para enseñarle el colgante siempre con cuidado de que no me vea el tío. El hospital es enorme de cojones, como un laberinto y cuando entro en el ascensor hay que meter el piso al que vas como en un teclado numérico, como si hubiese cientos de pisos.
Está conmigo un compañero del colegio, encontramos al abuelo y le enseño el colgante y le digo que el cabronazo del tío lo había sacado de la niña, el abuelo casi me lo quita de las manos como si supiese lo que es y atención!! se pone a chupar el colgante y empieza a rejuvenecer como si fuese el santo grial en indiana jones o algo así, y al ver que hace esto mi compañero y yo se lo quitamos y le empujamos por una de las ventanas del hospital (vamos que le matamos).
Así que ahora busco a la madre por el laberíntico hospital, la encuentro y le cuento la movida del tío, los dos estamos llorando y le doy el colgante que es como si significase que la niña era especial, que habría sido la hostia para la religión esa y que es una tragedia que palmase.
Y ya está quería escribirlo a toda costa, pero lo debo haber hecho fatal porq estoy viendo la tele a la vez...